¿Por qué tiene cojera?
Posibles causas de la cojera en gatos
La cojera en gatos puede deberse a múltiples factores, desde lesiones leves hasta enfermedades crónicas. Algunas causas comunes incluyen:
- Traumatismos: Caídas, golpes o peleas con otros animales pueden provocar esguinces, fracturas o heridas en las almohadillas.
- Artritis: Frecuente en gatos mayores, especialmente en razas grandes como el Maine Coon.
- Infecciones: Abscesos por mordeduras o enfermedades como la panleucopenia.
- Problemas neurológicos: Daños en nervios o la columna vertebral.
Ejemplo: Un gato que cojea tras caer de una ventana podría tener una fractura no visible.
Síntomas asociados a la cojera
Observar otros signos ayuda a identificar la gravedad:
- Hinchazón o calor en la zona afectada.
- Lamido excesivo de una pata.
- Pérdida de apetito o cambios en el comportamiento.
- Dificultad para saltar o subir escaleras.
Dato: El 60% de las cojeras en gatos jóvenes se relacionan con traumatismos, según estudios veterinarios.
Diagnóstico y primeros auxilios
Si tu gato cojea, sigue estos pasos:
- Examina la pata: Busca heridas, espinas clavadas o uñas rotas. Usa guantes para evitar mordeduras.
- Limita su movimiento: Evita que salte o corra para no empeorar la lesión.
- Aplica frío: En casos de hinchazón, usa una compresa fría envuelta en un paño (nunca directamente).
Consejo: No administres medicamentos humanos sin consultar a un veterinario. El paracetamol es tóxico para gatos.
Tratamientos veterinarios comunes
Según la causa, el profesional puede recomendar:
- Analgésicos o antiinflamatorios: Para aliviar el dolor en casos de artritis.
- Cirugía: Si hay fracturas o rotura de ligamentos.
- Fisioterapia: En razas propensas a displasia de cadera, como el Persa.
- Antibióticos: Para infecciones o abscesos.
Ejemplo: Un gato con artritis puede mejorar con suplementos de glucosamina y cambios en su entorno, como rampas.
Prevención y cuidados a largo plazo
Reduce riesgos con estas prácticas:
- Control de peso: La obesidad aumenta la presión en articulaciones.
- Enriquecimiento ambiental: Usa rascadores estables para evitar caídas.
- Revisiones anuales: Detecta problemas tempranos, especialmente en razas predispuestas.
Dato: Los gatos de interior tienen menos traumatismos, pero mayor riesgo de enfermedades degenerativas.
Cuándo acudir al veterinario
Busca ayuda urgente si:
- La cojera dura más de 24 horas.
- Hay deformidad visible o sangrado.
- El gato no apoya la pata en absoluto.
- Presenta fiebre o letargo.
Consejo: Graba un video del comportamiento de tu gato para mostrar al veterinario, ya que pueden ocultar síntomas en la consulta.
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