Cosas que irritan bastante a tu gato
Normalmente puedes hacer cosas que irriten a tu gato, quizás inconscientemente. Los gatos tienden a ser muy sensibles en muchos aspectos y modificaban de humor regularmente, es por ello que tienes que investigar esmeradamente el comportamiento y el género de personalidad que tiene tu gato. Sin embargo, te presentare ciertos motivos comunes que tienen la posibilidad de irritar a tu gato:
Mirarlo de forma directa a los ojos
Tristemente, una observación extendida dirigida de manera directa a los ojos de tu mascota no se interpretará como una expresión de amor. En el lenguaje del gato, una observación tan persistente significa advertencia, amenaza y, en el caso de persistencia, predisposición para atacar. El contacto visual forzado puede hacer que tu gato crea que estamos preparados para un acto de agresión. Si deseas enviarle a tu gato una señal amistosa, dale una mirada rápida y guiñale un ojo. Este matiz, una interrupción tan temporal del contacto visual, es de gran importancia y cambia completamente el contenido del mensaje. Parpadear significa aceptación, saludo, signo de amistad.
El estruendos
Oreja de gato terminantemente es mucho más sensible que humano. El gato escucha los sonidos más fuertes que nosotros y su rango audible también es considerablemente mayor. No es de extrañar que los ronroneos no sean amantes del estruendos. No pueden aguantar sonidos especialmente agudos, penetrantes, repentinos y fuertes, como el sonido de un motor, el estallido de petardos, música fuerte, todas y cada una de las campanas, bocinas, pero también los sonidos emitidos por los electrodomésticos, como la lavadora giratoria, la aspiradora o el secador para el cabello. Este último es especialmente odiado, no solo hace ruido, sino que asimismo sopla (una racha de aire apuntada a la cara de un gato es otra cosa que los gatos no tienen la posibilidad de aguantar, irrita sus sensibles bigotes). Como es natural, mucho es dependiente de la naturaleza del gato y de los sonidos a los que se haya acostumbrado. Sin embargo, exponer al gato a sonidos que no le gustan, en especial a escenarios altos, es increíblemente estresante para un animal. Todo guardián cuyo gato es sensible, por ejemplo, al rugido de los fuegos artificiales o la música alta.
Pereza al limpiar la caja de arena
Una caja de arena sucia ocupa un lugar señalado en la lista de cosas que los gatos detestan. No obstante, hay ronroneos que se ocuparán de sus pretensiones aun en el baño, cuya higiene, según su método, deja bastante que querer. Sin embargo, los gatos no son inusuales y necesitan una limpieza inmaculada. Ellos huelen pedante una caja de arena sin limpiar y si no pasa la prueba ... pueden matar fuera de ella. Esto se aplica tanto a los gatos que se cuidan en una caja de arena compartida, como solo a los gatos que no van a entrar en un inodoro sucio. La indolencia humana en la limpieza del inodoro del gato se castiga de esta manera ... con la necesidad de limpiar no solo el inodoro.
Acariciarlo mal ... y no bien
El mapa corporal del gato incluye zonas que merece la pena acariciar, zonas especialmente deseables para acariciar, pero también zonas prohibidas. A la mayor parte de los gatos no les gusta que les toquen el abdomen, las patas y la base de la cola. Tampoco le agrada acariciar el pelaje insistente, fuerte y frotar. El momento de las caricias es en realidad el instante elegido por el gato. Acariciar a una mascota cuando no quiere hacerlo da como resultado que el gato se vaya o se exprese de distintas formas. Lo mejor es acariciar a tu gato con suavidad, acariciarlo y rascarlo levemente con las yemas de los dedos, naturalmente cuando desee, lo que indudablemente te señalará exigiendo tu atención. A los gatos les agrada acariciar la espalda, la cabeza, tras las orejas y rascarse los lados de la boca y debajo del mentón.
Ponerle un collar con una campana
Un collar de campana es definitivamente una mala iniciativa. Los gatos odian un elemento molesto que suena regularmente cerca de su cabeza. E inclusive si cree que su mascota tolera la campana de bebé, consulte el punto 2 de esta lista. La audición de los gatos es considerablemente más sensible que la audición humana, y llevar la persona que llama cerca del cuello con cada movimiento del objeto puede ocasionar problemas de comportamiento (debido al incremento del agobio) y de salud (daño auditivo).
Juegos de disfraces
Los gatos, excepto las esfinges sin pelo, no necesitan ropa. Su pelaje es su protección natural contra el frío y la humedad. También es completamente innecesario vestir a los gatos "por diversión" con el disfraz de Papá Noel, elfo o cualquier otro, si bien sea despacio y delicado. Todo tipo de ropa limita el movimiento, interfiere con las ocupaciones del día a día del gato, como saltar sobre el alféizar de una ventana o estante y el inodoro. No disfrace a tu gato para Navidad o para "fotografías entretenidas" y enséñeles a sus hijos que, a diferencia de las muñecas o las mascotas, los gatos son muy molestos tratándose de disfrazarse.
Cerrarle la puerta
Las puertas cerradas limitan el espacio del gato, complican la exploración del territorio y hacen irrealizable ver lo que ocurre en la habitación, de la que manan diversos sonidos y olores. Indudablemente sucede algo interesante a puerta clausurada que merece la pena investigar. Es por eso que los gatos están deseoso por aprender diferentes maneras de abrir puertas observando a la gente y otros gatos que viven en la casa. Varios gatos han dominado el salto en la manija de la puerta con perfección y, lo que, es mucho más, otros gatos de manera frecuente lo aprenden del animal que primero encontró una salida a una situación inconveniente.
Salas de rociado con aromas cítricos o lavanda
Aroma de limón fresco, mandarina dulce, que recuerda a los campos de lavanda provenzal… ¡Prominente! - Desafortunadamente, los gatos no comparten muchas opciones humanas por los olores, y estos aromas están en la lista del gato de artículos increíblemente malolientes. Estos fragancias irritan el olor del gato (considerablemente más sensible que el olor humano). Entonces, ¿qué aromas tienes que eludir tanto como resulte posible, cuando menos en concentraciones mucho más altas?
Aparte de los cítricos y la lavanda, a los gatos no les agradan los aromas de mentol-eucalipto, el vinagre (por lo tanto, a pesar de sus excelentes propiedades bactericidas y limpiadoras, no debe utilizarse para adecentar la caja de arena), la cebolla y el pimiento. A los gatos tampoco les gusta ... el fragancia de otros gatos. Puede ocasionar distintas reacciones. Algunos gatos olfatearán persistentemente la "información" que llevas en tu ropa, otros, en especial los habituales bebés que solo son gatos, tienen la posibilidad de aun silbarle al guía y también ir a otra habitación enfadados. Ten en cuenta que esta no es la reacción del enemigo hacia usted, sino hacia los animales cuyo olor ha empapado tu ropa, zapatos o bolso.
Renovación, reordenamiento ...
Los gatos son en su mayor parte conservadores. Valoran la estabilidad, la rutina (¡lo que no significa aburrimiento!); A los gatos no les agrada el cambio. Instantaneamente notan un nuevo objeto en la vivienda, que tienen que olisquear, examinar y después frotar para "domesticarlo" con su fragancia: las feromonas de las mejillas, gracias a las que el reciente elemento se volverá más familiar y adecuado para el resto de la casa.
Sin embargo, un cambio "revolucionario" de mobiliario, renovación o mudanza es un cambio tan drástico para la mayoría de los gatos que se transforman en una fuente de agobio. No olvides elaborar adecuadamente a su mascota para estas revoluciones y guiarlo delicadamente en los momentos más difíciles. Una esquina relajado lleno de objetos familiares (juguetes, manta preferida), feromonas calmantes, acatando otros elementos de la rutina día tras día (horas de comida, tiempo de juego, etcétera.) indudablemente ayudará a tu gato a amoldarse a una exclusiva situación.
Dejarlo solo bastante tiempo
Opuestamente a la creencia popular, los gatos no son solitarios que se sienten mejor solo en su compañía. Evidentemente, cada animal tiene su personalidad y sus pretensiones de contacto humano. Hay gatos efusivos, que requieren caricias constantemente, y asimismo hay leones de sofá distinguidos, que solo necesitan estar en exactamente la misma habitación. Pero es esencial que esté ahí. El gato doméstico desea atención, compañía y tiempo juntos.
Si lo dejas solo, se pondrá triste, puede intentar bajar sus pretensiones (por poner un ejemplo, jugar) de una manera inaceptable (por ejemplo, en cortinas). Soledad, los gatos familiares pueden incluso deprimirse. Mientras tanto, un amigo ronroneante no requiere un enfoque incesante en él; es suficiente que le muestres precaución, atención, satisfagas sus necesidades no solo con respecto a la comida, sino más bien también a la diversión y el contacto. Entonces verás que tienes varios en casa
Deja una respuesta